PESE A LAS CONDICIONES CLIMÁTICAS

Alrededor de las 23 horas se largó a llover para no parar hasta la madrugada, así que forzosamente se suspendió la jornada del sábado que era el último día de este encuentro. Aprovechando la buena predisposición de los propietarios de los pubs ubicado en España y San Martín y Moreno y Belgrano, parte de las bandas que no pudieron subirse al escenario, actuaron allí. De esta manera la fiesta continuó.  

FOTOS JUAN CARLOS MINGARRO

La XXXI edición del Azul Rock llegó a su fin sin el acompañamiento de los factores climáticos, por lo menos el segundo y tercer día, ya que el jueves la concurrencia del público fue excelente, sólo hubo fallas técnicas y el sonido se escuchó bajo, según músicos entrevistados por este diario.

El encuentro se desarrolló en el Balneario Municipal, en la Plaza Almirante Brown, aunque anoche cuando a las 23 horas aproximadamente se largó a llover y la gente comenzó a irse, los propietarios de los locales nocturnos Bangkok y Oktubre se encontraban presentes ofrecieron la posibilidad de continuar con el Azul Rock bajo techo. Fue así que las bandas Marrajo, Korea y The Kripis estuvieron en el pub ubicado en Moreno y Belgrano.

En tanto que Perros Cayejeros actuó en Oktubre. Es por ello que tanto desde la organización, como de los músicos se agradece profundamente a Neri Lauría y a Facundo Miranda por la buena predisposición.

Las bandas que quedaron sin tocar son “Piantaos”, “Las armas” (de Buenos Aires) “Stickers”, “Dr. Black”, “Ankamora” y “Descalzos”.

EL TIEMPO consultó a uno de los organizadores de esta actividad desde hace tres años, Rody Wagner aunque destacó que hay un montón de gente detrás de toda esta movida. Si bien él es la cara visible pero son varias las áreas de la Municipalidad o privadas que están colaborando para que este encuentro se lleve adelante.

Pese a las precipitaciones, “un balance positivo”

En principio, Wagner precisó que “pese a todas las dificultades que tuvimos, más que nada el clima todo salió bien y el balance es positivo”.

Sobre las jornadas “el jueves la plaza estuvo repleta de público y pudimos terminar la jornada completa, en la noche del viernes al igual que la del sábado se nos complicó por la lluvia y nos quedaron afuera un total de ocho bandas sin tocar entre ambos días. Así que reprogramamos para terminar bien el sábado y que nadie se quede sin actuar pero fue imposible”.

Explicó que “amén de lo que nosotros podemos llegar a hacer al organizar un evento al aire libre sabemos que dependemos de las condiciones climáticas, pero en el ambiente de la música ya se sabe cómo es la historia. Por suerte que estaban los dueños de los bares y la fiesta se pudo terminar igual, por ahí la presentación no fue tan grande como en el escenario de Azul Rock pero se sacaron las ganas de tocar”.

Así que en definitiva la última banda que tocó en el Balneario fue “Forasteros” (Olavarría), cuyo tecladista es el nieto de Estela de Carlotto, Ignacio Montoya Carlotto. En dicha oportunidad subieron al escenario los mellizos Bautista y Ceferino Vera.

Reiteró que “el balance es positivo, hablando con la gente siempre hay cuestiones que surgen, y el desafío que tenemos es el de llegar a la perfección”.

Para terminar, subrayó que hay muchas áreas que están dedicadas completamente al Azul Rock “y a ellos les estamos eternamente agradecidos”.  

EL DATO

También estuvo la exposición de fotos de Juan Carlos Mingarro de festivales de rock anteriores.